¡Hoy te espera un milagro!

Cada día tenemos que esperar cosas milagrosas de Dios, creerlas y confesarlas, pedírselas a nuestro Padre bueno. Esperemos con ansias, cada día, las bendiciones asignadas para hoy.



Salmos 118:24 (RVR1960)

24 Este es el día que hizo el Señor;
Nos gozaremos y alegraremos en él.


¿Sabías que hoy te espera un milagro?



Nuestro camino en Cristo es un camino hacia arriba, en ascenso, hacia el trono de Dios. Dios estableció los tiempos y las edades para los hombres, esto es, los años, los meses, las semanas y los días y determinó junto con ellos una porción de milagros para cada día en particular, y cada uno de éstos son bendiciones maravillosas que él tiene preparadas para sus hijos. 

Cada uno de nosotros tiene asignado por el Señor esos tiempos y edades que son una escalera que nos lleva cada día un paso más a la perfección y al propósito eterno de Dios. En esta escalera de las edades celestiales existe un milagro por cada escalón y cada día que pasa podemos subir un escalón más y recibir esas sorpresas de Dios. Estos regalos de Dios se manifestarán según su plan y según nuestra necesidad. Leí en cierta oportunidad que el enemigo planifica tu día para detenerte y destruirte y es verdad, pero si el diablo hace esto ¿Cuánto más nuestro Padre celestial no tendrá algo planificado para nosotros en este día? No te quedes en el escalón de hoy, ni vuelvas atrás de los escalones que ya subiste en tu crecimiento, porque atrás ya no hay bendiciones. 

Muchos hijos del Señor se pierden una cantidad inmensa de bendiciones, lo digo porque yo he sido uno de ellos, por distracciones, afanes, falta de disciplina e incredulidad..., pero me he propuesto recuperar todo y no perderme nada más. Jesús dijo: "El pan nuestro de cada día dánoslo hoy", esta palabra no se refiere únicamente a que Dios te dará comida en este día, es mucho más que eso, el pan simboliza una bendición, una provisión y una revelación de Dios. Por lo que HOY te espera algo especial para tu vida. 

Hoy necesitas algo de Dios, porque nuestra vida no consiste solo en comida, sino en palabra y revelación de Dios, si hoy no recibes la bendición de tu Padre, te la puedes perder!

Levántate y reclama la bendición para hoy, esa bendición se manifiesta según tu necesidad y según el plan que el Señor estableció para tu vida, Dios tiene todo planificado para sus hijos, pero sus hijos muchas veces no tienen esto en cuenta y se pierden de la bendición cotidiana. 


Las bendiciones y sorpresas de Dios son muy variadas, quizás es algo que no esperas, que no sabes, que no conoces. ¿Te paso de tener días de agotamiento, de tristeza, de dolor, de peleas y luchas?, pues ya sabes que no importa lo que te venga en esta día, simplemente reclama tu provisión de hoy en oración, el pan nuestro de cada día. Ese pan de Dios suplirá algo que necesitas, algo que Dios te quiere dar hoy, solo dile al Señor: “Padre hoy recibo esa bendición que tienes para mi, suple mis necesidades, sana mis dolencias, dame el milagro que tienes para hoy”. 

Algunos recibirán una revelación de la palabra de Dios, un toque del Espíritu que transformará sus vidas, otros una sanidad, o un contacto de oro, personas que te abrirán puertas, para otros el milagro será una gran idea de lo alto, soluciones, un momento inolvidable con tu familia o amigos, puede ser prosperidad económica, salud, gozo, descanso, ventas en sus negocios, un acenso en el trabajo, paz, felicidad, otros conocerán el amor de sus vida, esa pareja que estabas deseando, y miles de otras cosas más preparadas para nosotros según la necesidad. 

Solo debes ejecutar por la fe y la oración el milagro que Dios tiene hoy para vos, no te lo pierdas, avanza un paso más, sube el escalón que tienes para hoy. 

Cada día tenemos que esperar cosas milagrosas de Dios, creerlas y confesarlas, pedírselas a nuestro Padre bueno. Esperemos con ansias y con expectativas las bendiciones asignadas para hoy, porque nuestro Dios es un Dios de sorpresas, si lo crees te aseguro que hoy será un día muy especial. 

Muchos hemos pasado días malos y nos hemos acostumbrado a esperar un día difícil, pesado, pero es tiempo de cambiar esa mentalidad y comenzar a desatar todo lo que en el cielo está listo para derramarse, eso que esperas, eso que necesitas, Dios ordena nuestros pasos, tus sueños están más cerca que ayer, se va armando un rompecabezas y nuestra vida va tomando otra forma cada día. No te resignes al pesimismo, a la queja o a la incredulidad, a partir de hoy recuerda esperar sorpresas del Señor y pedirle en fe ¡¡que sea desatada esa bendición y ese milagro que te está esperando para hoy!